SANA en Español
Viena, SANA
La Junta de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI) adoptó ayer en la clausura de su 42º periodo de sesiones sostenido en la sede de la organización en Viena, una serie de decisiones destinadas a fortalecer el papel de la misma en apoyar a los países en vía de desarrollo para lograr el desarrollo industrial.
En una palabra ante la Junta, el representante permanente de Siria ante la ONU y las organizaciones industriales en Viena, Bassam Sabbagh hizo una panorámica sobre los barbáricos actos de sabotaje que sufrió el sector industrial en Siria a manos de los terroristas, sobre todo en las ciudades industriales de Alepo y Damasco-campo.
Sabbagh denunció que los terroristas saquearon las máquinas y los almacenes de las fábricas de Alepo y las contrabandearon a Turquía, donde las vendieron a precios casi regalados.
En su palabra, Sabbagh aludió también a los actos de sabotaje contra las líneas de trasmisión de energía eléctrica, necesarias para la labor de las fábricas sirias, súmales las injustas e unilaterales sanciones económicas impuestas por algunos países contra Siria, las cuales contribuyeron a detener la importación de las materias primas y la exportación de los productos nacionales.
El alto diplomático destacó la necesidad de que los países miembros de la ONUDI ayuden a Siria en rehabilitar y reconstruir su infraestructura industrial afectada por los actos terroristas.
Sabbagh ofreció una presentación sobre la situación de la cooperación entre Siria y la ONUDI en el marco del acuerdo firmado entre ambas partes para modernizar la industria siria.
Es de señalar que Siria fue elegida miembro de la Junta de Desarrollo Industrial por cuatro años durante la Conferencia General de la ONUDI celebrada en Lima el pasado año.
Lynn A., Riyad Sh.
